¿Está preparado para imaginar su vida en los próximos años? ¿Has identificado cuál es tu propósito de vida o qué es lo que quieres lograr en la vida? ¿Qué aspiraciones tiene para el futuro? ¿Cómo te gustaría que te recordaran cuando ya no estés? ¿Qué quieres hacer con el resto de tu vida? La herramienta de Mi Yo Futuro nos va a permitir pasar de estas visualizaciones concretas a una más general.
El último ingrediente que incluiremos en la Metodología Autocoaching y que compone nuestro interior es el propósito de vida (o sueños), o también conocido en algunas escuelas como Mi Yo Futuro.
El propósito de vida de una persona es algo que cada individuo debe realizar por sí mismo. Pero para mejorar el autoconocimiento sobre el propósito de vida te sugerimos el siguiente ejercicio:
Escribe en unos párrafos, tomándote el tiempo necesario, y sin prisas, los principales deseos o sueños que aspiras alcanzar en 10 o 20 años. Intenta evitar las generalidades, como por ejemplo, quiero ser feliz, quiero tener dinero, deseo estar bien de la salud. Para conseguir definir mejor este apartado, es recomendable que respondas a las preguntas. Sabiendo de dónde eres y dónde estar ahora, ¿a qué quiero llegar en un futuro? ¿Cómo me gustaría que te recordaran? ¿Qué quiero hacer con el resto de mi vida?
Un sencillo ejercicio consiste en plantearse lo siguiente: Imagínese dentro de veinte años, de pie entre quienes mejor le conocen, mientras le rinden un gran homenaje. ¿Qué te gustaría que dijeran de ti?
Permítase el tiempo necesario para considerar sus opciones, es esencial. Podemos sentirnos abrumados por las quejas cotidianas y perdernos la visión de conjunto. Descansa un poco y revisa tu decisión al día siguiente; puede que así tengas una nueva perspectiva.
¿Por qué no dar un paso más y adaptar las preguntas a su área de especialización? De este modo, podrá sacar el máximo partido a su base de conocimientos. Por ejemplo, si fueras un político, podrías pensar: si se viera dentro de diez años, ¿qué no te perdonarías, no haber hecho cuando tuviste poder para ello? ¿Por qué pirámides quieres que te recuerden? ¿Qué harías si siguieras tus propios valores?
Una vez que sepas a qué aspiras, ten fe en ti mismo y en que tienes el valor de dar los pasos necesarios para alcanzar el éxito. Cree en tus propias capacidades y recuerda que el éxito es algo que tú mismo creas.
¿Quieres conseguir todos tus sueños? ¿Te atreves a alcanzar tus sueños? Hay preguntas sencillas y rápidas para ver el grado de compromiso. En cada pregunta poderosa, déjate llevar por tu instinto y lee la respuesta asociada a cada una de ellas. Asegúrate de responder en el orden indicado.
¿Sabes lo que quieres en la vida?
Continuemos... ¿sabes de verdad lo que quieres en la vida?
Avanzando un poco más, ¿de verdad me prometes que sabes lo que quieres en la vida?
Para terminar ¿verdad que es maravilloso hacer lo que te gusta en la vida?
Esto un ejemplo de sesión de coaching que se puede hacer para descubrir los sueños de un cliente. Lo importante no son las preguntas, lo importante es que tengas la oportunidad de pensar en tus sueños o propósito de vida.
Saluda al primer chaval de diez años con el que te cruces y hazle la misma pregunta. De verdad, inténtalo. Con el debido respeto, pregunta desde la curiosidad. Reflexiona sobre las respuestas, y tal vez sea el momento de reflexionar, ¿cuándo renuncié a lo sueños?
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